Cuando menos catorce personas murieron durante el fin de semana a causa de actos de violencia delictiva y conflictos sociales ocurridos en distintas regiones del país, principalmente en la provincia Santiago y la capital, entre las que destacan los asesinatos de un ganadero y su hijo de seis años en Las Matas de Farfán, de San Juan, y de un joven acribillado de 11 balazos por desconocidos en Navarrete, de Santiago.
Los crímenes de Nilson Montero Tapia, de 60, y del niño Fabier Montero, han estremecido la comunidad de El Corral, de Las Matas de Farfán, mientras que en Navarrete, los familiares y vecinos de Juan Carlos Tejada, de 23 años, están horrizados por la ejecución del jóven que fue sorprendido mientras dormía en su casa.
Una de las últimas muertes en las 48 horas se registró al mediodía de ayer lunes en la Romana, cuando el joven Junior Jiménez Cedeño mató de un disparo en el abdomen a su hermano, Edgard Alfonso Jiménez, de 23 años, en medio de una discusión familiar en su casa del barrio Villa Verde.
Con relación al primer caso, la Policía ha arrestado a dos hombres que habrían confesado haber matado al hacendado Montero para robarle una pistola y cierta cantidad de dinero.
Al niño lo habrían torturado y ahorcado para que les dijera dónde había escondido el padre el dinero, según la investigación. En el otro caso, la Policía investiga si se trató de un atraco o un “ajuste de cuentas” el asesinato de Tejada en Navarrete por cuatro encapuchados la madruga del domingo.
Entre las víctimas mortales del fin de semana están el joven Jonathan Herrera, de 19 años, quien fue apuñalado por un menor de 15 en la calle Doctor Betances esquina París, de la Francisca, mientras que el sector Guajimía, de Herrera, cayó abatido por una presunta banda de narcotraficantes Juan Carlos Mena (Aguaco), quien alegadamente manejaba puntos de drogas en la zona.
En Manoguayabo, de Santo Domingo Oeste, Santa Tejada, de 39 años, fue muerta por su exmarido, y en Santiago una multitud linchó a palos y puñaladas a Ángel Aridio Medrano, de 56 años, quien en un arranque de celos acababa de matar a su exmujer, y los vecinos de la Villa Olímpica, de Santiago, donde ocurrió el hecho, pensaron que se trataba de un atracador. En Villa González, dos atracadores mataron de un balazo en la cabeza a Camilo Antonio Roques Jimenes, de 28 años, quien trató de perseguirlos luego de robar en una banca de lotería.
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