MILES DE PERSONAS DE TODOS LOS ESTRATOS SOCIALES ASISTIERON AL ÚLTIMO ADIÓS A LA CUARTA MIRABAL
Miles de personas de todos los estratos sociales de la provincia Hermanas Mirabal, la región Norte y el país, desfilaron ayer en caravana desde la comunidad de Ojo de Agua hasta el Cementerio Municipal de Salcedo, para dar el último adiós a Bélgica Adela Mirabal (doña Dedé), quien falleció el viernes luego de permanecer recluida en una clínica de la capital con complicaciones respiratorias.
Antes de su sepelio, los restos de la distinguida dama, la última sobreviviente de las hermanas Patria, Minerva y María Teresa Mirabal, asesinadas brutalmente junto a su chofer durante la tiranía de Trujillo, fueron velados en el Club “Hermanas Mirabal”, de su natal comunidad de Ojo de Agua.
A ese lugar se dieron cita miles de personas de diferentes clases sociales, tanto de su comunidad como de otros pueblos de la provincia Hermanas Mirabal y de gran parte del país.
En la entrada del club, sus hijos Jaime David y Jaime Enrique, así como los seis que procrearon sus tres hermanas y que ella asumió como suyos tras su cobarde asesinato, recibían de los visitantes muestras de solidaridad y de afecto.
Solidaridad en el sepelio
Mientras los restos eran trasladados desde Ojo de Agua hasta el Cementerio Municipal para ser sepultados en la tumba donde descansaban los restos de sus tres hermanas, numerosas personas de todas las edades, desde los frentes de residencias, establecimientos comerciales, patios y en las calles, portaban afiches alusivos a las heroínas y lanzaban flores.
Mientras los restos eran trasladados desde Ojo de Agua hasta el Cementerio Municipal para ser sepultados en la tumba donde descansaban los restos de sus tres hermanas, numerosas personas de todas las edades, desde los frentes de residencias, establecimientos comerciales, patios y en las calles, portaban afiches alusivos a las heroínas y lanzaban flores.
En el Cementerio se congregó una gran multitud, entre ellos familiares, personas del pueblo, políticos, historiadores, profesionales de todas las ramas, estudiantes de escuelas públicas y privadas, entre otros.
Antes de partir el cortejo fúnebre se hizo un breve recital de canciones alusivas a las madres y a las hermanas Mirabal.
El presidente del Consejo Regional del Norte, José Aníbal García dijo en el sepelio que la provincia Hermanas Mirabal está de luto y que Salcedo, Ojo de Agua, Tenares y Villa Tapia, se tiraron a las calles a dar muestra de solidaridad a la familia de doña Dedé.
A las 3:00 de la tarde el obispo de la Diócesis de La Vega, monseñor Antonio Camilo González, presidió una misa de cuerpo presente. El prelado proclamó en la homilía que servir a los demás es un don de Dios y que doña Dedé supo servir amor y que fue ejemplo de trabajo, de dignidad, respeto, amistad y de solidaridad a todos los que estaban a su lado.
Dijo que fue sonrisa, fortaleza, belleza, dulzura y que nunca perdió su valentía y sus afanes de servir a los demás.
Mientras que la diputada Minou Tavárez Mirabal, al leer un documento en la misa de cuerpo presente, resaltó la valentía de su tía y madre de crianza, y dijo que fue la que cortó la trenza que mantenía a toda una nación atada a su propia cobardía.
Subrayó que la fenecida dama a la que siempre llamó mamá, lo dio todo por su país y por su familia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario