Escogido difunde por TV y la pantalla interna del play un resumen de aquellas que le han afectado
En los últimos días a los árbitros dominicanos le han caído los palitos encima, un hecho que se ha repetido cada vez que han tenido sobre sus hombros la reponsabilidad total de juzgar en un deporte de pulgadas, como es el béisbol, cuanto acontece en el terreno de juego.
Paradógicamente, las críticas han llovido por decisiones tomadas en primera y segunda bases, principalmente, donde usualmente han estado y no en el plato, una papa caliente que normalmente ha sido desempeñada por norteamericanos.
“Yo creo que los árbitros han hecho un buen trabajo”, considera el presidente de la Liga de Béisbol Profesional, Leonardo Matos Berrido. “Siempre he creído en eso. Que se puede mejorar... Claro, todo en la vida se puede mejorar”.
Indica que ha estado presente en las últimas 22 ediciones de la Serie del Caribe y nunca ha escuchado quejas sobre la labor realizada por los “umpires” dominicanos.
Los Leones del Escogido no piensan igual y en un hecho inusual tienen dos días jugando con un casco negro en señal de protesta porque entienen que han sido perjudicados por los jueces locales del juego.
No conforme con ello, en el encuentro de anoche contra las Estrellas presentaron en su transmisión televisiva, como dueños de casa, un compendio de jugadas cuestionables en todas las almohadillas. También tienen una proclama en el camerino en la que exhortan a sus miembros a enfrentar todo aquello que le afecta.
El grupo lo integran Juan Díaz, Vermán Mejía, Félix Tejeda, Ramón Ferrer, Mariano Vizcaíno, Ramón de Los Santos, Domingo Polanco, Santos Silvestre, Santo Castillo, Simeón Vásquez, Francisco Díaz, Edward Pinales, Vladimir Mojica, Felipe Morillo y Rúben Hidalgo. El supervisor es Rafael Uribe.
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