AUTOBÚS CHOCÓ A YIPETA CERCA DE LA CRUZ ROJA
El manejo temerario e imprudente por las calles del ensanche Miraflores, que tantas veces fue denunciado por los vecinos de la zona, se puso en evidencia ayer cuando un autobús que se había desviado de su ruta, y que transitaba a una excesiva velocidad, chocó a una yipeta y la pegó contra un poste de luz, ocasionando heridas a uno de los ocupantes y un gran susto a los vecinos.
Tras el violento choque el chofer del autobús huyó, siendo detenido el cobrador del vehículo, Manolo Báez Morillo, quien admitió ante agentes policiales y los vecinos del lugar que se desplazaban de forma irregular por la zona.
Los afectados en el accidente fueron trasladados de inmediato a la emergencia del centro de Otorrinolaringología y Especialidades, donde fueron asistidos.
La joven Juddy Michele García era quien manejaba el vehículo, y su hijo menor de diez años, quien estaba en el asiento trasero resultó con laceraciones en la cabeza, pero hasta anoche estaban fuera de peligro. El desorden del tráfico en Miraflores ha sido denunciado en innumerables ocasiones por sus vecinos, esto a raíz de que una ruta de autobuses se instaló ilegalmente en la zona, lo que produjo la intervención de la Autoridad Metropolitana del Transporte (Amet), pero aun así los conductores siguen obviando las reglamentaciones.
Julia Mercedes Díaz, quien estaba a bordo del autobús cuando ocurrió el impacto, narró a LISTÍN DIARIO que el chofer transitaba a alta velocidad, lo que la motivó a llamarle la atención, aunque el conductor no le hizo caso.
Dijo que el autobús era de una ruta que lleva a Las Caobas y a la entrada de Manoguayabo, y que le sorprendió su desvío ya que, según contó, la avenida 27 de Febrero, que es por donde transitan originalmente, no estaba tan complicada en cuanto al tráfico.
El accidente ocurrió en la calle Juan Henríquez Dunant, justo frente a la Cruz Roja, donde precisamente anoche a las 7:30 tenían una reunión los vecinos del ensanche para tratar las acciones que tomarían en contra de los autobuses públicos.
De hecho, el descontento fue tan grande al momento del accidente que algunos moradores destruyeron los cristales de la guagua pública, siendo protegidos por todos los vecinos cuando la Policía intentó apresarlos. La madre de Juddy García contó que escucharon el fuerte estruendo pero que nunca llegaron a pensar que se trataba de su hija.
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