viernes, 5 de julio de 2013

Criminales atacan a militares y policías

              
Los restos de la joven teniente del Ejército Nacional, Suleica Ponciano Polanco, fueron sepultados ayer en su ciudad natal, Hato Mayor.

Los últimos ataques mortales de que han sido víctimas miembros de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional parecen indicar que esos cuerpos operativos están bajo la mira de la delincuencia, a quienes despojan de sus armas y continúan agregando nuevos números a su prontuario criminal, en medio de una cuestionada acción de la justicia para castigarlos con el rigor que manda la ley.
Desde el pasado domingo han ocurrido cinco ataques contra oficiales de la Policía y las Fuerzas Armadas, muriendo dos de ellos, uno por impactos de balas y de heridas de arma blanca.
Los dos últimos casos ocurrieron, uno en la capital contra un teniente policial que sobrevivió a una agresión, y otro en San Pedro de Macorís contra un segundo teniente de esa misma institución, adscrito al Cuerpo de Ayudantes de Protección de Dignatarios.
La última víctima mortal, la joven teniente del Ejército Nacional, Suleica Ponciano Polanco, asesinada el miércoles pasado, fue sepultada ayer en su pueblo natal, Hato Mayor. Era miembro de la seguridad de una hija del presidente Danilo Medina.
Ayer, un teniente de la Policía fue atacado por dos delincuentes que intentaron despojarle de su arma de reglamento y de una pasola, pero su reacción rápida impidió el hecho, matando a uno e hiriendo a otro.
Las autoridades anunciaron ayer el arresto de los presuntos culpables del asesinato de la joven Ponciano Polanco y del teniente de la Fuerza Aérea Dominicana (FAD), Manuel de Jesús Sosa Jiménez.
La oficial Ponciano Polanco, adscrita al DNI, fue asesinada la mañana del miércoles en el sector El Tamarindo, de Santo Domingo. El teniente Sosa Jiménez fue muerto a balazos el pasado domingo por dos hombres, en presencia de sus dos hijas.
En el primer caso, el vocero de la Policía, coronel Jacobo Mateo Moquete, informó que fue enviado a la justicia como principal responsable de la autoría del crimen de Ponciano Polanco, Arturo Santiago Alcántara Nepomuceno, un convicto por narcotráfico que hace apenas quince días había salido de prisión bajo fianza. Está prófugo, con relación a este hecho, William Perdomo (Willy), cómplice del crimen.
Sobre la muerte del oficial Sosa Jiménez, Mateo Moquete dijo que están bajo arresto Brando Cabral de Jesús, de  22años, y Eduardo Arias, de 24, quienes forman parte de una presunta banda de delincuentes a la que se le atribuyen múltiples delitos y crímenes en la zona norte del Distrito Nacional, entre estos asesinatos, asaltos violentos, robo y agresiones.
Esta muerte ocurrió en la calle Domingo Moreno Jiménez del barrio Mejoramiento Social, del Distrito Nacional, mientras el teniente Sosa, quien trabajaba en las Fuerzas Armadas como instructor de boxeo, conducía una motocicleta, con sus dos hijas, de 17 y 11 años. Ambas jovencitas identificaron a los matadores de su padre ante los investigadores de la Policía y el ministerio público.
En el caso de Suleica Ponciano, Mateo Moquete dijo que los acusados de su muerte son dos delincuentes reconocidos por los vecinos del barrio El Tamarindo, donde habían cometido decenas de robos y atracos a distintas personas y transeúntes, principalmente mujeres, a quienes despojaban de carteras, prendas, dinero, teléfonos móviles y otros objetos.
Los investigadores buscan a otros sospechosos en participar en robos y atracos con los dos hombres que fueron enviados anoche a los tribunales de la provincia de Santo Domingo, donde se le conocerán a primeras horas de este vienes medidas de coerción.
Los investigadores de Inteligencia y Homicidios de la Policía han realizaron unos 12 allanamientos para capturar a los sospechosos e interrogaron a más de 30 personas, entre vecinos, conocidos y familiares de los acusados. Aunque los asaltantes robaron el arma de reglamento de la segunda teniente, su carnet del DNI y el Ejército Nacional, las autoridades no han informado si han recuperado estos documentos.
Ponciano Polanco fue herida en el costado izquierdo, alrededor de las 5:40 de la mañana.
Fue socorrida por vecinos que la trasladaron al Centro Médico Integral II, del kilómetro 10 de la carretera Mella, pero falleció en el camino. En su cartera fueron encontrados dos teléfonos celulares, un reloj, monedero, su cédula de Identidad y dos tarjetas de crédito.
Ataque más reciente
El ataque más reciente de la delincuencia contra efectivos militares y policiales ocurrió la noche del miércoles pasado contra un teniente del cuerpo de orden público, a cargo de dos individuos que intentaron despojarlo de su arma de reglamento y de una motocicleta en la que viajaba por la avenida Ecológica, que circunda el Parque Mirador Norte, de Santo Domingo Norte.
El teniente Rigoberto Benito Santos Lorenzo fue atacado por los dos hombres, pero uno de los dos fue abatido y el otro terminó con heridas.
“En una zona solitaria y de noche, los presuntos delincuentes encañonaron al teniente Rigoberto Benito Santos Lorenzo, pero éste reaccionó rápidamente y logró herirlos antes de que le dispararan”, dijo el vocero de la Policía, coronel Jacobo Mateo Moquete.
El atacante muerto en el hecho fue identificado como Alexis Rincón, de 26 años. El herido es Miguel Ángel Poster, de 23, quien fue ingresado al Hospital Ney Arias Lora.
Es el cuarto oficial de la Policía y las Fuerzas Armadas que es atacado por asaltantes desde el pasado domingo, muriendo dos de ellos por heridas de balas y otro herido con arma blanca. 
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DOS HOMBRES APUÑALAN A OFICIAL DE POLICÍA EN SPM 

El corresponsal de Listín Diario en San Pedro de Macorís, Francis Aníbal, informó que un segundo teniente de la Policía adscrito al Cuerpo de Ayudantes de Protección de Dignatarios, fue herido de varias puñaladas por desconocidos que lo interceptaron saliendo de su vivienda del Barrio Buenos Aires de esta ciudad.
El herido es el segundo teniente Johnny Vásquez Tellerías, residente en la vivienda número 15 de la calle Caracas del referido barrio.
Presenta herida punzo cortante en la región inguinal y el omóplato izquierdo, según el médico que lo atendió en la sala de emergencias del Hospital Jaime Oliver Pino del Seguro Social.
Las heridas se las ocasiónó uno de dos elementos desconocidos a bordo de una motocicleta tipo pasola, Honda Lead 100, de color negro y sin plásticos, armados de pistolas y cuchillos.
El informe policial indica que lo despojaron de su arma de reglamento, una pistola Smith and Wesson, la que no recuerda el número, y de su teléfono celular Black Berry.
Agentes del Departamento de Investigaciones Criminales de la Dirección Regional Sureste de la Policía están tras la pista de quienes cometieron el hecho.

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