Las sofisticadas lanchas del narcotráfico internacional siguen incursionando en las costas y las aguas territoriales dominicanas, pero alrededor de 30 embarcaciones, la mayoría de ellas con dos motores fuera de borda y de alta potencia han sido interceptadas en alta mar o en playas de los litorales sur y este del país por tropas especializadas de la Armada Dominicana y de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), con el apoyo de la Fuerza Aérea, la Guardia Costera de Estados Unidos y la agencia antidrogas DEA.
La última embarcación ilegal que intentó desembarcar una carga de 1,110 kilogramos de cocaína fue interceptada la madrugada de ayer a unas 14 millas náuticas de la Playa Punta Salinas, de Baní, y su tripulación de tres hombres, dos extranjeros y un dominicano, fue arrestada por las fuerzas antinarcóticos que los persiguieron por más de una hora en el mar. Más de 10 mil kilos de cocaína y otras drogas transportados por las lanchas rápidas desde costas venezolanas y colombianas han sido decomisadas en los últimos dos años.
La embarcación tipo Eduardoño, interceptada antenoche en Punta Salinas, traía en un compartimiento secreto un alijo de cocaína distribuido en 42 pacas de 25 paquetes cada una; dos pacas de 28 paquetes, y otras dos de 27 paquetes, para un total de 1,060 paquetes, informó el vocero de la DNCD, Miguel Medina.
Agregó que durante el operativo conjunto por aire, mar y tierra se destacó la coordinación efectiva de los diferentes organismos que conforman el sistema antidrogas, resultando detenidos un dominicano, un colombiano y un venezolano, quienes fueron conducidos a la Base Naval de Calderas, en el municipio Baní de la provincia Peravia, y posteriormente trasladados a la sede central de la DNCD.
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